Prueba Kia Carens 1.7 CRDI VGT Drive 115 CV

La experiencia es un grado. Esto es lo que hace valer Kia a la hora de desarrollar el nuevo Carens.

Es la cuarta generación  que el fabricante pone en la calle y, si a esos conocimientos previos de la categoría, se añaden las nuevas pautas de diseño estrenadas por la marca hace poco y la mejora en los estándares de calidad, los resultados no pueden ser más que completamente favorables.

El nuevo Kia Carens ha cambiado las proporciones ligeramente, lo que influye positivamente en su aspecto y mejora su aerodinámica. Además, su nueva línea es especialmente atractiva, con un diseño de muy buen nivel, que incluso tiene en cuenta con nitidez los trazos de la zaga.

Algo similar sucede con el interior, que además de su mayor calidad, mejora desde aspectos de tipo práctico, muy tenidos en cuenta por los compradores de este tipo de vehículos monovolumen.

Se ofrece con versiones de 5 y 7 plazas, estas últimas opcionales por 700 euros a añadir al precio del vehículo, con el inconveniente clásico de que en el caso de llevar 7 pasajeros, nos quedamos prácticamente sin maletero. Si necesitamos viajar con 7 plazas ocupadas, o bien ponemos baca o portaequipajes cerrado, un remolque, o simplemente mandamos las maletas por adelantado, mediante un servicio de courrier.

Sin embargo, con 5 asientos malo será, que no podamos estibar con facilidad todo el equipaje en el generoso maletero.

Viajar es sin duda una de las vocaciones de este modelo. La situación elevada de los asientos, nada exagerada por cierto y perfectamente asimilable en lo que a la postura de conducción se refiere, al de un turismo convencional, es uno de sus atributos. Mediante los reglajes de suspensión, se ha conseguido limitar en buena medida el balanceo, por lo que también mejora la agilidad en terreno virado. Además, la luminosidad de interior del habitáculo es otro de los aspectos que contribuyen a mejorar la vida a bordo. Por otro lado, distribuir el interior en función de las necesidades de espacio y carga es una maniobra muy rápida y sencilla, con la modularidad típica de este tipo de vehículos. Sin embargo tampoco han corregido uno de los aspectos negativos de los asientos modulares, en este y en otros competidores. Las plazas traseras no son especialmente cómodas, solo correctas.

En la versión de 7 plazas, la tercera fila es algo limitada. estamos obligados a deslizar la fila central hacia delante, pero tampoco el acceso se convierte en una maniobra muy sencilla y además no tenemos mucho espacio. Es una fila de emergencia y destinada casi a la gente menuda.

Desde aspectos puramente dinámicos, ya hemos hablado de control del balanceo, lo que es muy importante porque genera mucha comodidad en carreteras viradas, pero además el Carens tiene un comportamiento bastante conseguido en carreteras abiertas, pero no se muestra demasiado ágil cuando le obligamos a cambios de apoyo muy marcados.. Nos ha gustado mucho la dirección, siempre que no recurramos a las mayores asistencias disponibles, y sus tarados tienen un perfecto compromiso. También ofrece una buen aislamiento a ruidos, pero no así a las vibraciones del motor, que no llegan al nivel de filtrado de su hermano mayor.

El resto de los elementos que ayudan o intervienen en el comportamiento son bastante eficaces. Los frenos son perfectos, la dirección, si elegimos los tarados más duros, se muestra fiel y precisa, no así si elegimos las ayudas más exageradas, que casi la convierten en la dirección e una consola de videojuegos.

El motor sin embargo, a pesar de ofrecer 115 CV, nos mueve sin excesivos problemas, claro, siempre que no vayamos con el vehículo cargado hasta los topes, en cuyo caso tendremos que tomarnos las cosas con más calma. Se muestra también bastante discreto en los consumos, ya que superar los 7 litros solo sucederá en situaciones poco habituales: coche muy cargado u orografía manifiestamente en contra.

Buen diseño, un interior practico, un buen motor, con consumos razonables y un precio muy competitivo de 18.690 euros sin el PIVE, nos parecen suficientes argumentos para que si necesitamos un vehículo de sus características, el Kia Carens esté entre nuestros candidatos.