Seat Alhambra 2.0 TDI CR 170 CV DSG Style

Es cierto que la proliferación de vehículos monovolumen de tipo compacto, está poniendo en serias dificultades la venta de modelos como el Alhambra, un vehículo de dimensiones generosas, con 4,85 m de longitud, 1,90 m de anchura y 1,72 m de altura, lo que le proporciona unas dotes de practicidad enormes. Sin embargo no podemos negar que la verdadera esencia de estos prácticos automóviles está perfectamente representada en ellos. En el caso de Seat, el Alhambra ha vendido el pasado año un total de 1.700 unidades. Pocas, si las comparamos con las 10.793 colocadas por la familia Altea.

El nacimiento de estos nuevos modelos monovolumen compactos, que tampoco lo son tanto por cierto, y los elevados precios del Alhambra y sus rivales -este vehículo cuesta 40.135 euros por ser el más alto de gama, pero el más económico no baja de los 30.750 euros- ha desviado la intención de compra.Sin embargo, después de analizar su situación en el mercado, y de ver su aspecto quizás más negativo, el precio, no podemos menos que rendirnos ante los que han sido verdaderos pioneros de los vehículos de este tipo.

Sus ventajas saltan a la vista en cuanto le sometemos al más rutinario análisis. Su tamaño es la primera. Estamos ante un vehículo con unas dotes viajeras inigualables para la familia en su conjunto, si la queremos llevar con el máximo confort y un elevado nivel de seguridad. Su practicidad y su versatilidad  son casi camaleónica por la variedad de posibilidades que ofrece. Antes debíamos eliminar físicamente los asientos, pero ahora todos se recogen en un plis plas y se queda una superficie totalmente plana. Con esta funcionalidad, se nos permite jugar con el equipaje y los pasajeros, de forma que podemos elegir un máximo de plazas, siete, o un máximo de carga,  dejando el interior limitados a los dos asientos delanteros. Tota una gama de posibilidades. Toda esta funcionalidad se completa con numerosos huecos en suelo y puertas.

Muy práctico, pero también muy refinado

El Seat Alhambra que hemos probado, además de parecernos un vehículo totalmente práctico, define el interior con unos acabados de berlina de lujo, incluida la piel para los asientos y otros detalles técnicos. Encima, con el motor TDI de 170 CV y el cambio DSG se muestra extraordinariamente dinámico. Nos ha parecido una delicia en todos los sentidos. Se mueve con facilidad, el cambio es muy eficaz y cómodo, y los consumos sorprenden por lo aquilatado de las cifras. Se anuncian unos quizás muy optimistas 5,9 litros de consumo medio ponderado que no dudamos que se consigan en laboratorio, pero acostumbrarse a consumir una media de 7 litros a poco que lo tratemos con suavidad, nos parece una cifra más que razonable, fantástica.

Otro matiz que debemos hacerle se refiere a su comportamiento en curva, y no precisamente porque la estabilidad sea un problema. Al ir sentados muy altos, la sensación de balanceo se multiplica. Nos hubiera gustado que este movimiento lateral de la carrocería estuviera algo más limitado. De esta forma los pasajeros sufrirían menos zarandeo si circulamos por trazados virados de montaña, en los que deberemos bajar el ritmo si no queremos que la gente menuda, o no tan menuda por cierto, nos hagan pagar las consecuencias.

Esta sin embargo,  no es una característica exclusiva del Alhambra, que en esta versión nos propone una sociedad entre motor y caja de cambios de primerísimo nivel. No nos va a faltar nunca el resuello en puertos de montaña, y en vías despejadas, viajaremos con el motor muy bajo de vueltas y en zonas de máxima eficiencia, sin problemas.

Muchas opciones

Ya hemos dicho que el Alhambra es un coche grande, perfecto para desplazarnos acompañados de cuatro pasajeros con todo el equipaje necesario y algo más, o con otros seis acompañantes con lo justo, pero al que por otro lado no le falta de nada en materia de confort y seguridad.  Las tercera fila de asientos es opcional por 783 euros más. Esta muy bien rematado y resulta agradable al tacto y a la vista. Nos parece muy interesante la posibilidad de que las puertas laterales y el portón trasero sean automáticos, lo que facilita las operaciones y evita, por ejemplo, que nos pillemos las manos. Se ofrece también como una opción por 1.041 euros. Además estas puertas elevan la comodidad de acceso a las plazas posteriores por su enorme tamaño. Dispone además de indicadores de parking en todo su perímetro y la opción de asistente al aparcamiento por otros 383 euros.

En definitiva, el Alhambra tiene muy bien reflejado en sus genes la practicidad de un completo modelo monovolumen y también el esfuerzo económico que debemos realizado para disfrutarlo. Los compactos son más pequeños, lógicamente más baratos, pero no ofrecen ni la comodidad ni la funcionalidad de estos prácticos gigantes del asfalto.