El Kia Ceed que ahora hemos probado no es un coche más en la gama del constructor coreano. Es uno de los pioneros del cambio tecnológico de la marca.

La nueva generación el Kia Ceed magnifica los cambios de base y tecnología que el grupo ha llevado a cabo en los últimos tiempos.Es cierto que en los últimos años la marca ha evolucionado de una forma notable, pero con este coche sienta las bases para el futuro a medio plazo, aunque no se sepa todavía si va a ser hibrido, eléctrico puro o de hidrógeno.

De momento nos hemos conformado con probar una versión con un enorme interés. No solo lleva un propulsor de gasolina, lo que según nuestras necesidades de movilidad puede ser acertado o no, también aporta una carrocería familiar que presenta unas enormes dotes prácticas.

Este motor de 120 CV es la oferta básica dentro de los propulsores de gasolina, con un 140 CV de 1,4 litros y cuatro cilindros por encima. Si nos inclináramos por un diésel, el Kia Ceed ofrece potencias de 115 y 136 CV.

La idea que nos rondaba al principio era la de las posibilidades de este motor. 120 CV, con un par de 172 Nm a 4.000 rpm, ya nos sonaban como algo limitadas. Tiene sus limitaciones, pero tan y como está estructurado ahora mismo el tráfico, viajar con tranquilidad a buen crucero, aunque superemos la media de carga posible, y disfrutar el resto del año de un vehículo con un funcionamiento suave y con un consumo correcto, es una de las ventajas de este modelo. Anuncia 5,6 litros de media, pero la realidad es que en carretera, siguiendo un crucero de 120 km/h, será difícil bajar de los 6,5 y algo más si cargamos su estupendo maletero y completamos su capacidad interior, aunque solo sea con cuatro plazas.

Nos ha gustado su comportamiento. Va muy bien ajustado de suspensiones, sin llegar a ser duro, ni excesivamente blando. Se nota algo atrás en cuanto lo cargamos con inercias verticales, pero nada alarmante. En definitiva, cuando nos movemos se comporta como un vehículo estable y cómodo, y en ciudad disfrutamos de una suavidad encomiable. La única crítica: el tacto impreciso y gomoso del cambio de marchas, algo que la marca tendría que mejorar. No es que hagan un cambio de competición, pero mejorar ese tacto algo desagradable no creemos que sea difícil. Hay que resaltar que no ha caído en la tentación de montar un cambio de sólo 5 relaciones. Hubiera sido imperdonable en un coche es este nivel de potencia.

Por otro lado nos ha gustado y mucho su interior. Bien presentado, buenos ajustes, diseño atractivo y muy convincente, además de unos asientos delanteros estupendos y una excelente habitabilidad. Debemos destacar la supericie de carga, que como opción cuenta con un sistema de carriles y vallas de sujeción que nos permitirá sujetar el equipaje para evitar que este se mueva en el caso de que el maleteo no vaya completamente lleno.

En definitiva, un sobresaliente a la carrocería familiar Tourer del Ceed. Un notable a su comportamiento y un aprobado a su motor que podria ser una nota más alta si subimos al de 140 CV y, sobre todo, si nos decidimos por el diésel, incluso el de 115 CV, que seguro nos dará mucho mejores sensaciones, aunque solo sea por sus mayores valores de par y sus consumos. Tangámoslo en cuenta si vamos a realizar más viajes de los dos habituales que el conductor medio realiza al año. El precio del diésel sube de los 24.100 a los 25.300, con un consumo que podría situarse en alrededor de 5 litros, lo que supone un ahorro importante. En ciudad, la mejoría sería aún mayor.

Ficha Técnica

Motor

Nº Cilindros: 3 en línea

Cilindrada: 998 cm3

Tipo de combustible: Gasolina

Potencia: 120 CV a 6.000 rpm

Par máximo: 172 Nm a 4.000 rpm

Cambio: Manual de 6 relaciones

Neumáticos: 225/45 R 17

Carrocería

Nº de plazas: 5

Peso en vacío: 1.334 kg