No sólo es intención de Toyota, es también de todos los fabricantes, pero es la marca japonesa la que ha implantado un original e innovador sistema de desarrollo de vehículos.
El desarrollo de nuevos modelos tiene un peso muy notable en la cuenta de resultados. Todas las marcas intentan reducirlos, bien con acuerdos puntuales con otros fabricantes, o mediante el desarrollo de nuevos procedimientos. Toyota anuncia su objetivo de reducir en un 20 por ciento los costes de desarrollo, pasando por el uso compartido en muchos de sus productos de piezas y componentes. Además, mediante este sistema de producción, se lograrán reducir en un 55 por ciento el nivel de emisiones producidas en sus fábricas.
La Nueva Arquitectura Global de Toyota es uno de los elementos más importantes para conseguir estos fines. Uno de los aspectos más notables de este nuevo plan es la utilización de nuevas plataformas comunes a todos sus vehículos, y el desarrollo de nuevos componentes para sus motores, para partir de una base común modular. Además, y no menos importante, es la disminución global de los consumos. Toyota afirma que en total, en los últimos tiempos, ha conseguido aumentar su eficiencia global, o lo que es lo mismo, ha conseguido ahorrar hasta un 25 por ciento en el consumo de sus motores, pero con un 15 por ciento de aumento de potencia.
Nuevas plataformas
Las nuevas plataformas incluyen la recolocación de los elementos mecánicos, y se ha conseguido también reducir de manera importante la altura del centro de gravedad de sus motores, con lo que se puede mejorar también el diseño y se aumenta la agilidad y comportamiento de los vehículos. La rigidez crece de forma notable, entre un 30 y un 65 por ciento según modelos, pero al mismo tiempo se ahorra peso total utilizando soldaduras láser y uniones a través de tornillos.
Las nuevas y prometedoras plataformas se empezarán a desplegar este año en un modelo con tracción delantera. Un vehículo de dimensiones medias. Para los compactos y grandes, también con tracción delantera y propulsión posterior llegará un poco más tarde. La mitad de los modelos producidos en 2020 utilizarán estas nuevas bases.
Disminuir los elevados costes de producción
Otro de los aspectos en los que Toyota está inmersa es en rebajar los costes de producción mediante plantas más eficaces, disminuyendo así los altos niveles de inversión necesarios para arrancar el montaje de nuevos modelos. La posibilidad de producir varios vehículos en la misma línea con menos cambios, facilitará la producción de un mismo vehículo en diferentes fábricas, con los que los costes de transporte se reducirán. Con relación a las inversiones, el coste de adaptación de una fábrica al cambio de modelo esperan que puede reducirse en un 50 por ciento con relación a los costes de 2008. El nivel de competitividad, con aumentos claros en la productividad y la fabricación cada vez más limpia son otros de los aspectos contemplados en este ambicioso programa de excelencia en la producción de nuevos vehículos acometido por Toyota en todo el mundo.
