Prueba Ford Fiesta 5p Titanium X 1.0 EcoBoost 125 CV Auto-Start-Stop

Este Ford Fiesta 5p Titanium del que hoy hablamos en esta prueba es el tope de gama si no incluimos al especial  y deportivo  ST. En precio tiene por encima a la versión animada por el motor diésel de motor 1.6 y 95 CV, aunque solo por  unos 400 euros de incremento, y al mencionado ST.

Está equipado con el galardonado motor de un litro EcoBoost, esta vez con una potencia de nada menos que 125 CV, una potencia  nada desdeñable para un vehículo de su categoría, por su pequeño tamaño y su reducido peso.

Esta versión no está pensada para un uso ciudadano en exclusiva, sino que nos permite una utilización en carretera más frecuente.  Su potencia nos lo permite con mucha generosidad, aunque se echa mucho de menos la sexta marcha, que nos posibilitaría una conducción a en autopista a más bajas revoluciones de motor, reduciendo aún más el consumo, aunque no queremos decir con ello que a 120 km/h el `propulsor se queje los más mínimo porque los desarrollos de transmisión sean muy recortados.

 Las cifras de consumo que se ofrecen más abajo en la tabla son las proporcionadas por la marca, y son harto difíciles de conseguir, sino es en las condiciones óptimas en que se ha hecho la medición. Estas cifras bajan considerablemente cuando se sale a carretera, pero en cuanto se hace un uso más urbano el consumo sube de forma notable.

La cifra mínima conseguida es de 6,6 litros con un uso mixto y sin buscar una conducción extremadamente ecológica, pero dista mucho de los 4,3 litros que la marca anuncia. Su uso en poblaciones en las que , por ejemplo, haya que hacer uso de multitud de rotondas, produce un aumento bastante sustancial del consumo de combustible, en tanto en cuanto los pequeños acelerones  para poder incorporarse a estas resultan en una inyección abundante de gasolina.

Las sensaciones que proporciona cuando lo conducimos  son bastante satisfactorias, con un motor que le proporciona suficiente potencia para salir airoso de cualquier situación que requiera un poco de empuje, como las incorporaciones a vías más rápidas con mucho tráfico, además de permitir una marcha en carretera suave y cómoda. Otro aspecto muy positivo de este motor es la más que correcta entrega de potencia incluso a bajas revoluciones, no teniendo que bajar de marcha  aunque precisemos de sus mejores aceleraciones.

Al tener el acabado superior, el nivel de equipamiento es también generoso. El aspecto interior es bastante agradable a la vista, con una bonita tapicería, un salpicadero de plástico con un acabado rugoso, bastantes piezas de plástico negro brillante y detalles cromados que proporcionan  un buen contraste con los tonos oscuros. El volante de cuero multifunción tiene un buen tacto y los mandos en él instalados son muy útiles, como el control de volumen de la radio, la emisora o el control de crucero. En esta versión en concreto se ha incluido el denominado paquete Nav-Cam, que incluye Bluetooth, navegador SD Sony, asistente de emergencia SYNC, 4 altavoces delanteros y 4 traseros, control de voz y cámara de aparcamiento trasera.  Dispone también   de una pantalla de 5 pulgadas para el navegador, la cámara y la radio.