Skoda Yeti Outdoor 2.0 TDI CR 110 CV Ambition

El Skoda Yeti Outdoor es un ejemplo de coche a la moda. Todas las marcas andan como locas buscando nuevos estilos, coches con una forma diferente de trasportarnos o simplemente ofreciendo una capacidad de personalización avanzada que nos permita tener un coche prácticamente a la carta. Con toda esa materia gris pensando como sorprendernos, la verdad es que no pasa un día sin que se nos planteen nuevas y originales posibilidades de acceder a nuestro vehículo soñado.

Sin embargo hay marcas que todavía juegan sobre seguro. Quizás porque dentro de los alambicados grupos industriales a los que pertenecen, la innovación y la sorpresa se queda para otras marcas más especializadas.

El caso de Skoda es claro. Su oferta es de coches lógicos, bien pertrechados, eficientes y, sobre todo a buen precio. El caso del Skoda Yeti Outdoor es un ejemplo casi de libro. Ni tan siquiera tiene aspecto de SUV, aunque milita en este segmento. Sus formas son más sencillas, respondiendo a lo que podríamos entender como un SW más elevado, aunque en la última remodelación y más en el Outdoor que probamos, su aspecto de todo camino este mucho más marcado.

De todas formas, el Yeti no desmerece en absoluto en el aspecto estético. A nosotros por lo menos nos gusta, porque además ese estilo está apoyado en un interior habitable y sobre todo muy práctico y modulable gracias a la eficaz banqueta trasera, con regulaciones y posibilidades dignas del más genuino monovolumen.

Otro tanto podemos comentar de su aspecto y acabados interiores. El salpicadero del Skoda Yeti Outdoor es atractivo y su acabado de primer nivel. Lo mismo sucede con la ergonomía, que se adapta mejor a las tallas grandes, pero si bajamos en las medidas no nos quedamos demasiado lejos de alcanzar la postura ideal.

El motor elegido para la prueba ha sido el eficiente 2.0 con 110 CV de potencia. Cuando la mayoría de sus rivales se deciden por utilizar los nuevos 1,6 litros, Skoda  continúa utilizando algunos motores ya casi desclasificados por el grupo. Eso tiene dos ventajas. Primero son motores completamente probados. La segunda ventaja es que proporcionan más par que los 1,6 litros, lo que resulta en este caso uno de los aspectos más destacables de esta versión del Yeti. El motor con 110 CV tiene lógicamente sus limitaciones en un coche que pesa prácticamente tonelada y media. Los consumos reales- anuncia 5,1 de media, se sitúan más en los 6,5 en general y abusando de carretera.

Su comportamiento es de primer nivel. No suena ni vibra, se conduce sin esfuerzo y en cualquier situación siempre está dispuesto a llevarnos por donde le indiquemos. Uno de los aspectos que más nos ha gustado es su limitado balanceo, que nos permite disfrutar de un elevado nivel de confort de marcha aunque las carreteras sean muy viradas.

Gracias a su interior, no olvidemos que disponemos de un enorme maletero de 405 o 510 litros en función de la colocación de la banqueta trasera, y que puede llegar a los 1.580 litros totales, nos permite llevan con nosotros el equipaje necesario para aquellas salidas de ocio, viajes, o excursiones, e incluso convertirse en un gran aliado para ayudarnos a disfrutar de nuestro ocio, ya sea bicicleta, o un deporte náutico.

Además, hay que mencionar que la marca ofrece un descuento muy interesante en este modelo. De entrada el Yeti cuesta 24.940 euros, con la única opción en la unidad de pruebas de la pintura plata brillante que cuesta 440 euros. En total 25.380 euros, un precio ligeramente elevado que la marca se encarga de arreglar vía promociones con una campaña de 3.584 euros, más 2.079 si lo financiamos. En total el precio se queda en 19.717 euros sin el descuento del gobierno en el plan Pive.