Citroën C4 Aircross HDi 114 CV 4WD Exclusive

El Citroën C4 Aircross forma parte de la gama de la marca del doble chevron, pero de una forma muy poco ambiciosa. Cada vez resulta más habitual, y lo será aún más en el futuro, que las marcas firmen entre ellas alianzas y acuerdos puntuales, para poder satisfacer la demanda de determinados vehículos que se encuadran en nuevas categorías.  Más que categorías, cada vez es más exacto hablar de nichos, una palabra un tanto tétrica, pero muy descriptiva de lo que está sucediendo, ya que son segmentos muy limitados y también especializados y por lo tanto, muy poco rentables.

Esto es lo que ha sucedido con PSA, que ha utilizado la plataforma del Suv compacto Mitsubishi ASX para poder ofrecer el Citroën C4 Aircross, pero en alguna medida, con los atributos específicos de la marca. Ya lo hacía con el C-Crosser y ahora baja un escalón para colocarse en un segmento casi imprescindible, ya que este segmento es uno de los pocos que reflejan en sus cuentas comerciales algunos síntomas de buena salud.

Citroën C4 Aircross

El estilo exterior de C-Crosser es Citroën lógicamente, aunque en el interior no se hayan preocupado demasiado de adaptarlo a sus estilo y exigencias, quedando por lo tanto un poco separado del resto de la gama y decepcionando un poco. Mantiene todo el interior del Mitsubishi ASX, bajo nuestro criterio un punto por debajo de lo que ofrece generalmente la marca francesa.

Su línea sin embargo  es agradable y atractiva. Responde a lo que se podría esperar de un vehículo que imita la imagen de los TT, con mayor altura, cinco puertas, con la zaga muy vertical y, como hemos comentado, un frontal hecho a medida de la imagen de marca de Citroën.

Su interior, como ya hemos adelantado, no resulta tan adecuado a lo que podemos esperar y no responde a los nuevos trazos que la marca está aplicando en la actualidad sus productos. Resulta por esto un tanto pobre e incluso en algunos aspectos bastante superado. Es uno más, y en estos momentos, es más necesario que nunca aportar algo más para destacar.

Citroën C4 Aircross

A nivel práctico tampoco proporciona ventajas importantes frente a la competencia, aunque sea su funcionalidad más que correcta, sobre todo en lo que se refiere a habitabilidad y capacidad de maletero, con la imprescindible posibilidad de recoger los asientos traseros para aumentan la capacidad de un maletero con 416 litros de capacidad mínima.

De momento hay que separar lo que son las características del motor a las del bastidor. El motor de 1,6 litros y 114 CV de potencia  se muestra muy bien equilibrado. Es elástico, con una buena y constante entrega de potencia a cualquier régimen, aunque sus prestaciones son solo correctas, esperándose algo más de nervio en un vehículo de su precio.  Tampoco está debidamente aislado, trasladando al interior, sobre todo a los pedales, vibraciones y ruidos molestos y notables al interior.

Citroën C4 Aircross

Su sistema de tracción, que ofrece varias posibilidades en esta versión con tracción a las cuatro  ruedas, es bastante poco convencional en la categoría. En esta se ofrecen vehículos con sistemas de tracción a dos o cuatro ruedas, pero nunca se nos ofrece la posibilidad de elegir entre ellas. El C4 Aircross hereda este sistema especial de tracción de Mitsubishi, un verdadero especialista en este sentido y mediante una rueda giratoria podemos elegir entre dos o cuatro ruedas motrices o una eficaz función look que fija el par que le llega a cada tren de una forma constante.

Los resultados dinámicos en los apartados de tracción y comportamiento son muy buenos en todo tipo de terrenos. Muy bien en asfalto seco, curva lenta o rápida. Con un agarre excelente  en agua y mejor en cuanto nos salimos del asfalto o disminuye la adherencia de forma notable.

Por su precio, que no resulta precisamente barato, la competencia ha afilado sus lápices de forma impresionante. Seguramente le falta a este C4 Aircross un espíritu Citroën más marcado, sobre todo ahora que ha desarrollado un estilo interior muy atractivo para los coches convencionales y especialmente moderno  e innovador para su división especial de lujo DS. Si a este estilo exterior, la añadiera un interior a su altura y un funcionamiento algo más refinado, los resultados cambiarían completamente.