El Corvette Stingray ha tenido el honor de ser el coche de seguridad en esta mítica prueba que se celebró el pasado 26 de mayo y que fue ganada por Tony Kanaan. Esta última edición ha sido la más rápida de la historia, con una media de 301,644 km/h. La carrera tuvo hasta 68 cambios de líder. Nuestro piloto Oriol Serviá acabó en el puesto 11, pero a sólo 7,8 segundos de ganador, debido a las numerosas salidas del coche de seguridad para neutralizar la carrera debido a los innumerables incidentes que se produjeron.
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