Prueba Seat Exeo 2.0 TDI CR 120 CV Style Ecomotive

La hiperactividad de la industria del automóvil produce situaciones extrañas. Se deben eliminar del mercado vehículos que están todavía muy actuales y nada superados. Asumir enormes inversiones para sustituirlos y arriesgarse a resultados poco brillantes, únicamente porque el producto lleva ya un tiempo en el mercado y puede experimentar algún cansancio comercial.

Este es el caso del Exeo, que aprovecha una versión del Audi A4 que se ha dejado de fabricar, al ser sustituido por una nueva generación de producto, pero que todavía estaba de plena vigencia en todos los sentidos.

Seat con muy buen criterio y unos ahorros de costes enormes y que permiten que el proyecto sea asumible, ha sabido aprovecharse  de esta situación, ofreciendo, repetimos con una enorme inteligencia, un vehículo con un caché y una categoría inédita en el fabricante español.

Sólo se ha incluido en la antigua carrocería del Audi A4 un frontal y una zaga características de la marca, dejando el interior sin muchos cambios. Sólo se utiliza el salpicadero del anterior Audi Cabrio, pero en el resto no se ha realizado modificación alguna.

Ningún defecto aparente, a no ser que hablemos de su habitabilidad, que no es muy generosa, sobre todo en las plazas posteriores, aunque sí pensamos que es más que suficiente y en directa relación con sus dimensiones externas. Su acabado interior es de primer nivel. Nada que objetar y a la misma altura que el de una marca premium. Es totalmente un Audi en este sentido, lo que es un piropo sin duda, pero incluso avanzaríamos un poco más cuando hablamos de las suspensiones.

Seat quizas peca en mucho de sus productos de utilizar unos reglajes más bien duros. Le aplica aquel slogan que la marca asumió como chasis ágil, pero que situaba la dureza de suspensiones más cerca de lo que podríamos definir como duro, que del esperable compromiso en versiones que no pretendían para nada presumir de deportividad.

En el caso de este Exeo Ecomotive de 120 CV, que lo que busca es combinar una buena presencia con unos consumos recortados -no deja de ser la versión más ecológica de la gama- el compromiso es, más que satisfactorio, brillante. La forma con que se aísla al habitáculo de las irregularidades del terreno, y la eficacia con que trabaja la amortiguación en apoyos mantenidos y cambios de dirección, nos demuestra que, por lo menos en esta ocasión, en Seat se ha conseguido casi la cuadratura del círculo, que en temas de suspensiones, sería el prefecto compromiso entre confort y dinamismo.

El motor TDI de 120 CV también nos muestra que el compromiso entre unos consumos recortados y una potencia suficiente no está , por lo menos en este caso, reñida. No es que sea un coche especialmente prestacional, pero sin duda nos permite viajar con una agilidad más que razonable, con una buena reserva de aceleración en toda situación, y, encima, con una autonomía más que destacable. El precio base de este vehículo es de 26.850 euros y con las opciones que llevaba montadas, entre las que el Navegador y la tapicería de piel suman entre ellas solas nada menos que 4.400 euros, el precio sube en total hasta los 33.230 euros finales.

Las ventajas del Seat Exeo pensamos que quedan claras después de esta prueba. No es un coche de exagerada amplitud, pero salvo este detalle, reúne todas las características que tiene que cumplir un vehículo con esa vitola. Está muy bien presentado, es lujoso por dentro, se comporta bien, anda mejor y encima su consumo no supondrá nunca  ningún inconveniente, justo todo lo contrario.