El monovolumen grande de Ford se renueva, incorporando el nuevo frontal y nuevos sistemas de ayuda a la conducción y seguridad.
EL nuevo frontal con la rejilla más grande es el que ya incorporan el Fiesta o el Focus. Incluye nuevos faros con luz diurna LED y faros traseros LED, unidos por una tira de cromo satinado. En la parte trasera los tubos de escape integrados están separados por el difusor, lo que le confiere más deportividad.
En el interior se respira sofisticación y confort, con mucho espacio y un techo panorámico de cristal. Los materiales del interior son de tacto suave y tiene remates cosidos.
El nuevo S-MAX está disponible con 5 o 7 asientos, con un sistema de abatimiento que ofrece diferentes configuraciones interiores.
Se han instalado cámaras, radares y sistemas de ultrasonido asociados a varios sistemas de ayuda a la conducción y seguridad. Uno de estos sistemas es el Asistente Precolisión que activa el freno ante un coche inminente después de avisar mediante señales luminosas y acústicas.
Los Faros Adaptativos LED ajustan el ángulo de iluminación según la carretera. Además la tecnología de luces largas detecta otros vehículos y deja de alumbrar en esa dirección para no deslumbrar a otros conductores.
Mediante cámaras y sensores se ayuda al conductor a aparcar de forma más fácil, con señales sonoras de proximidad o avisando si al salir de una plaza marcha atrás hay vehículos cerca.
Otros sistemas son el Reconocimiento de Señales de Tráfico, Asistente de Cambio de Carril o el Asistente Inteligente de Velocidad que permite establecer una velocidad máxima.
Los motores pueden ser diésel o el avanzado EcoBoost de gasolina.
La gama diésel ofrece propulsores como el TDCi 2.0 de 120 CV con cambio manual de seis velocidades, y un TDCi 2.0 con 150 o 180 CV con cambio manual o automático Powershift con doble embrague.
Los motores EcoBoost son el 1.5 de 160 CV con cambio manual y el 2.0 de 240 CV con cambio automático.
