Audi en el Salón de Ginebra nos muestra muchas de sus últimas novedades y una primicia que no dieron a conocer hasta el mismo martes día 4.
Algunos de los modelos de los que ya hemos hablado antes, pero que estaban expuestos de forma destacada, son el nuevo A3 Cabrio, el atractivo descapotable de capota de lona, que ha ganado unos centímetros a su antecesor y se comercializa con motores gasolina y diésel. En esta misma línea de coches especiales, pero en versión mucho más deportiva y dinámica, Audi expone la versión S3 Cabrio, como decimos, mucho más potente y selecto.
El Audi S1 y S1 Sportback también se dejan ver, con su recortado estilo deportivo, tracción quattro y un potente motor de 231 CV.
Las versiones Ultra se exponen como ejemplo de buen rendimiento y bajos consumos. Disponen además de un amplio equipamiento y componen la gama de vehículos con los motores más eficientes de la marca.
Pero lo más importante que ha presentado Audi han sido los nuevos deportivos TT, en la versión estándar, la versión más deportiva TTS, y el prototipo exagerado Audi TT quattro. El diseño del nuevo Audi TT vuelve ligeramente a sus orígenes, cogiendo detalles y formas de la primera y añorada generación.
Utiliza motores de 180 y 230 CV en la versión normal, y 310 en la TTS, pudiendo elegir entre tracción delantera o quattro, y caja de cambios manual o automática S tronic. La versión de 180 CV es la motorización diésel, con dos litros de cilindrada y una aceleración de 0 a 100 km/h en 7,2 segundos, con una cifra de velocidad máxima de 235 km/h, lo que está muy bien para tratarse además de un vehículo con unos consumos bastante recortados. Gracias a su eficiencia cumple la norma Euro 6, lo que le permite entrar en el selecto grupo Ultra de Audi.
Los motores gasolina desarrollan 230 CV para el Audi TT y 310 CV para el TTS. La aceleración de 0 a 100km para el motor de 230 CV es de 6 segundos con cambio manual y tracción delantera, mientras que la versión S tronic y tracción quattro lo consigue en solo 5,3 segundos. Alcanza los 250 km/h limitados electrónicamente. La versión más radical TTS mejora las prestaciones, con 4,7 segundos de aceleración aunque la velocidad máxima sigue siendo de 250 km/h debido al limitador.
El Audi TT quattro sport ha sido la sorpresa de la marca. Se ha diseñado prácticamente como coche carreras, ya que bajo su capó oculta un motor 2.0 TFSI sobrealimentado de 420 CV, lo que supone la impresionante cifra de 210 CV por litro de cilindrada. Este potentísimo motor consigue que se alcancen los 100 km/h saliendo de parado en tan solo 3,7 segundos. Pesa 1.344 kg, su motor sólo 140 kg y la carrocería es ultraligera.