Opel Zafira Tourer Excellence 2.0 CDTI 165 CV 7 plazas Aut.

Opel tiene quizás la mayor experiencia en ofrecer vehículos  monovolumenes con 7 plazas, con la particularidad de que estas sean escamoteables. Hay y ha habido muchos con 7 plazas, pero nos obligaban a realizar la dura tarea de sacar los pesados asientos del vehículo cuando queríamos mejorar la capacidad de carga. Muchos le han imitado, pero como vulgarmente se dice, el que tuvo retuvo y en este caso la versión Tourer del Zafira, un modelo de diseño avanzado y mejoras importantes en el interior, va una generación por delante y atrae por la eficacia del sistema de esconder los cinco asientos posteriores.

En esta nueva generación se elimina la banqueta corrida central, con lo que se gana en versatilidad, siendo ahora los cinco asientos traseros independientes. Esto tiene muchas ventajas, ya que al margen  de conseguir una superficie completamente plana, podremos elegir si abatimos uno o hasta cinco asientos. Tiene una peculiaridad importante además, podemos abatir la banqueta central de la segunda fila, consiguiendo de esta forma dos asientos muy amplios a los lados, con un perfecto apoyabrazos central.  Nosotros destacamos la facilidad de uso, la superficie de carga que se consigue y su versatilidad, aunque los asientos de las cinco plazas posteriores son quizás excesivamente duros. Otro detalle importante es que se ha ganado en altura desde el suelo al borde de las banquetas de la tercera fila, con lo que los ocupantes no van tan encogidos.

Además, y desde el punto de vista del confort de marcha y funcionalidad, el Zafira Tourer dispone de guías entre los asientos delanteros,  por donde se puede desplazar el apoyabrazos central, con enorme capacidad por cierto. Otro de los aspectos más cuidados y sobresalientes son la enorme cantidad de huecos que tenemos a nuestra disposición. Por ejemplo, frete al acompañante existen hasta tres guanteras, dos de ellas con tapa, que nos permiten descargar los bolsillos y llevar todo lo necesario para un largo desplazamiento.

Su estilo exterior es muy atractivo. Muy fluido y aerodinámico, no está exento de algunos adornos que sirven para subir la categoría visual del vehículo. Tiene calidad y lo demuestra en el interior, aunque algunos plásticos podrían ser mejores. Su postura al volante es muy buena y las dos plazas delanteras sorprenden por su comodidad.

De todas formas del Zafira Tourer lo que más nos gusta es como se comporta, convirtiéndose en un coche llamado a grandes desplazamientos. Es un prodigio de suavidad, lo que no es muy común en coches de su segmento. El motor no se oye, no vibra y hay que destacar también cómo funciona el cambio automático, con transiciones entre marchas muy suaves y sin mucho resbalamiento.

No podemos olvidar que estamos ante un vehículo monovolumen, en el que el balanceo es más acusado que en el resto de modelos, aunque sólo sea porque vamos sentados más altos. Sin embargo el balanceo no se acusa de una forma alarmante si mantenemos los cruceros habituales para un vehículo que está llamado a circular muy cargado.

El general no se nos ha mostrado tan austero en los consumos como se anuncia oficialmente. Si analizamos las cifras, vemos que está muy penalizado por el consumo urbano, que llega a los 8 litros, mientras que en carretera baja mucho, justo hasta los 4,9 litros. Aquí se ve la influencia del peso y sobre todo del cambio automático de tipo convencional, que es justo en las marchas más cortas y el inicio de la marcha en donde más exige al propulsor. A nosotros nos ha dado una cifra global de 7,4 litros, lo que es algo elevada teniendo en cuenta que no hemos hecho mucha ciudad.