Los coches por debajo de los 3,80 m de longitud, inscritos en el segmento de lo que denominamos coches ciudadanos, están aumentando poco a poco su presencia en el mercado.
La crisis, las dificultades del tráfico en las grandes ciudades, nuestra mentalidad más racional a la hora de adquirir un vehículo, y los precios de estos, están propiciando un aumento de la penetración total de esta categoría. En 2005 este segmento representaba un 2,5 por ciento de las ventas. En 2011 había superado ya el tres por ciento y los últimos cálculos la sitúan en más de un cinco por ciento cuando lleguemos a 2015.
Un 91 por ciento de estos modelos utilizan motores de gasolina. Casi todos no ofrecen versiones diésel. Un 90 por ciento no superan los 80 CV de potencia y el 70 por ciento son carrocerías de cinco puertas. Como se ve la versatilidad de las cinco puertas y el precio es fundamental a la hora de elegir este tipo de modelos.