Ferrari ya va calentando motores para el Salón de Ginebra. Ha preparado para esos días una nueva versión de su “básico” California, que se caracteriza por perder unos kilos y ganar algunos caballos más de potencia.
Treinta es la cifra, porque ese es el peso que se ha quitado de encima y también la potencia que ha ganado el motor V8 de 4,3 litros, pasando de 460 a 490 CV de potencia. Los trabajos de adelgazamiento se han centrado en la utilización de piezas de aluminio para la construcción de su bastidor. Las consecuencias, un 0 a 100 km/h de sólo 3,8 segundos.
Sin embargo eso no ha sido todo. Como puerta de entrada a Ferrari, el California propone ahora un interesante paquete denominado Handling Speciale, que mediante modificaciones en la suspensión, reduce el balanceo, con lo que el vehículo responde de forma más ágil e inmediata a las órdenes del conductor. Este paquete incluye amortiguadores regulables electrónicamente, nuevos muelles y una dirección un diez por ciento más directa. La gama de colores es más amplia, con posibilidades de combinar dos tonos aplicando la tecnología de tres capas.

