Quedamos en Brucculino

Culminación del sueño americano.

Brucculino  es un restaurante al que podría acudir regularmente Martin Scorsese,  si residiera en Madrid. Un lugar en el que se sentiría como en su propia casa y que podría servir como emplazamiento perfecto para el rodaje de una de sus películas. El nuevo reto de Ignazio Deias homenajea a la Little Italy y  adapta a la perfección la gastronomía tradicional italiana a la influencia cultural estadounidense.  Se puede hablar por tanto de una oferta culinaria basada en la historia, cuando los emigrantes del sur de Italia llegaron a Estados Unidos a finales del XIX y principios del XX.

El resultado es avasallador. Una carta realmente ocurrente que, con el nombre de sus platos, hace un guiño a grandes personajes de estirpe italiana. Destacan las hamburguesas como la de De Niro’s gourmet, con setas y trufas o la Tarantino’s, con tomate picante. Los manteles de cuadros rojos confieren al local un aire de lo más casero y familiar, sin duda el pilar fundamental sobre el que se asienta la cultura italoamericana…

La ubicación de esta sucursal de Little Italy no puede ser más urbanita, en pleno centro junto a la plaza de Olavide. Sólo falta el afamado puente para creer que nos encontramos en medio de Brooklyn, como un personaje cualquiera de Erase una vez en América.

Para interpretar Brucculino,  hay que conocer a Ignazio Deias (Silliqua, 1965), cerebro y corazón de esta idea gastronómica. Aventurero, inconformista “ cum laude” en la Universidad de la vida, su existencia se emparenta bastante a la de esos italianos compatriotas que buscaron fortuna y sueños en la Norteamérica de principios del siglo XX. Un buscavidas que ha logrado reactivar la cocina italiana en Madrid…

Sin una sólida formación académica sobre hostelería,  supo reinterpretar la cocina italiana en un lugar sin demasiadas pretensiones con aires de trattoría. Sus platos hablan por él: excelente la Caponata, con berenjena, tomate, pasas y piñones, previa al muy agradable el Vitello tonnato, con la salsa de atún servida aparte; y aceptables las berenjenas a la napolitana.

Para mí, el plato estrella son los Espaguetis con albóndigas, las clásicas meatballs tan populares en Nueva York, que también pueden tomarse sin pasta, sólo con salsa de tomate. Degustar raviolis rellenos de requesón de buffala con la RAI de fondo y el sugerente soniquete de los camareros italianos nos retrotrae a una época  en la que  Madonna era  adolescente…

Brucculino
brucculino@gmail.com
Calle Trafalgar, 17
28010. Madrid.
Tlf: 91 445 85 39

(Visited 60 times, 1 visits today)
Redacción

Autor: Redacción

Comparte este artículo en